“Yo quiero decir que sí como María”, la oración de hoy estuvo enfocada a nuestra vocación, oramos por seguir siendo fieles a ejemplo de María, nuestra Madre.
El tema de reflexión de este día fue Llamadas eclesiales para la Evangelización de hoy, animaron la reflexión el Padre Vicente Martin y el señor Fidel García Gutiérrez. Ambos nos presentaron el compromiso que tenemos con los pobres como consagradas y por nuestro compromiso eclesial. Nos recordó que los pobres son nuestros compañeros, por lo que nuestro compromiso con ellos es caminar juntos, como buenas samaritanas en actitud de continua renovación; Iglesia en salida, implica disponer el corazón y ensancharlo para amar a esos pobres y juntos sanar las heridas de un sistema deshumanizante que deja a su paso una sociedad sin DIOS que necesita una continua renovación para vivir desde la fe, la esperanza y el amor.
En este proceso sinodal todos somos invitados, la ANUNCIATA se siente convocada para hacer este proceso y ser fieles al Carisma Dominicano; los pobres han sido nuestra razón de ser y lo seguirán siendo en la medida que seamos coherentes con el Evangelio. Es nuestra hora y para ello debemos creerlo y “volar como las águilas”. Por la tarde hemos recogido los compromisos personales y comunitarios, coincidiendo en recuperar los espacios comunitarios y hacer posible comunidades en salida; fraternas, solidarias, misioneras y samaritanas. Siempre con sabor a Evangelio donde el mundo clama como nos exhorta el Papa Francisco en su mensaje Sinodal. Toda la riqueza del trabajo de este día la presentamos a Jesús eucaristía con cantos, reflexiones y silencios que recogen más que mil palabras.