Viacrucis de estudiantes de Ciclo Básico en el Día de la mujer
"Cada estación, cada paso, es un recordatorio de nuestra humanidad compartida"
Los jóvenes del Ciclo Básico del Colegio El Rosario, marcharon juntos, siguiendo las huellas de Jesús en su camino hacia la cruz. En cada estación, sintieron el dolor de la injusticia, la esperanza y la redención con un Viacrucis actualizado en conmemoración de la mujer.
En esta ocasión, cada grado tenía que representar, escenificar en sus dos estaciones la violencia que se comete contra las mujeres, la trata de personas, de la cual son víctimas muchas de ellas, la explotación laboral, sexual, la esclavitud, el embarazo precoz en adolescentes, el matrimonio infantil, entre otros temas.
Cada estación representada fue un testimonio del compromiso e innovación de los estudiantes, donde los cantos fueron adaptados en defensa de los derechos de las mujeres.
El 8 de marzo se ha convertido en un momento de confluencia para reivindicar la igualdad de derechos para todas y recordar que aún no se ha alcanzado en su totalidad, qué mejor oportunidad para hacerlo por medio de un viacrucis.
Este día queríamos ser, sobre todo, la voz de aquellas mujeres que están sufriendo violencia, que tienen como resultado un daño físico, sexual o psicológico, inclusive las que sufren las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto en la vida pública como en la privada. Además, reconocer el valor del desempeño de las mujeres en el ámbito social, político, cultural y religioso.
Como María, junto a la cruz, los jóvenes encontraron consuelo de poder cambiar estos paradigmas sociales en la comunidad. En su amor, vieron la esperanza de un mundo transformado y donde las mujeres no tengan que morir más en manos de quienes dicen amarlas.
¡La esperanza de un futuro mejor, nos sostiene!
Viacrucis de las manos del Ciclo Diversificado
¡Un profundo y conmovedor Viacrucis de las manos, protagonizado por los estudiantes del Ciclo Diversificado, en el cual hemos sido testigos de su compromiso y devoción, al recrear los pasos de Jesús en su camino hacia la crucifixión!
Es inspirador ver cómo nuestros jóvenes comprenden y se entregan a esta importante tradición de nuestra fe. A través de cada estación, reflexionamos sobre el sacrificio de Jesús y su mensaje de amor, redención y la importancia de utilizar nuestras manos para ayudar, acariciar, sembrar y amar.
Sus altares expresaban este compromiso por utilizar nuestras manos correctamente como Jesús, ya que sus representaciones estuvieron cargadas de mensajes para transformar y dejarnos transformar.
Agradecemos a estudiantes, profesores y padres de familia por su dedicación y participación en esta emotiva experiencia. Que este Viacrucis actualizado en cada ciclo fortalezca nuestra fe y nos motive a vivir en práctica permanente de compasión y solidaridad en nuestras vidas.